Identificación de especies |
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Características: Macho con las partes superiores castaño oscuro con listas rojizas; ancha ceja blanca, con lorums y auriculares negros bordeados por una lista blanca; las partes inferiores son crema; alas negruzcas, con una franja blanca; cola negruzca en el centro y extremos, con los lados blancos. La hembra es parecida al macho, pero con las partes superiores más claras y con la franja alar más pequeña. Pico y patas negros. Hábitat: Especie más asociada a las superficies húmedas que su pariente la Tarabilla común, pudiéndose encontrar en extensas praderas, siempre que existan atalayas apropiadas donde descansar. Costumbres: Al igual que su pariente gusta de posarse en la parte superior de las plantas en actitud erguida, sacudiendo frecuentemente las alas y cola. En el suelo camina a saltos. Se trata de un pájaro cuya alimentación básicamente se compone de insectos, gusanos y arañas. Nidificación: La época de cría de esta especie abarca desde mayo hasta julio, período en el que realiza una sola puesta. Esconde el nido en el suelo, entre la espesa vegetación, y en él deposita 5 ó 6 huevos, de los que tras 12-13 días de incubación nacen los polluelos, que empiezan a volar entre los 17 y 19 días. Movimientos migratorios: En abril llega proveniente del continente africano y se instala en su territorio, estando ya casi toda la población establecida en sus territorios de cría a primeros de mayo. A finales de agosto comienzas las primeras tarabillas norteñas a abandonar sus territorios de cría, siendo en septiembre cuando más patente se hace esta migración. El paso postnupcial se prolonga hasta finales de octubre. |