Identificación de especies

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 Ánade friso (Anas strepera)

Nombre común: Ánade Friso.

Nombre científico: Anas strepera.

Orden: Anseriformes.

Familia: Anatidae.

Longitud: 45-46 cm.

Envergadura: 82-85 cm.

Iris: Ø 10 mm.; castaño.

Estatus en Burgos: En paso e invernante.

 

Características:

El macho, en periodo nupcial, tiene el plumaje pardo grisáceo, con la cabeza y cuello más claros, y finamente vermiculado en el dorso y en los flancos; el pecho está profusamente listado con finas medias lunas oscuras; las alas son de color gris oscuro, en las que contrasta el espejuelo blanco muy conspicuo; abdomen blanco; el negro de sus coberteras superiores e inferiores contrastan de forma notable con el resto del cuerpo. El plumaje de la hembra es muy parecido al de la de Ánade azulón (Anas platyrhynchos), si bien el plumaje es más claro, el abdomen blanco y el espejuelo igualmente blanco, no azulado como en Anas platyrhynchos; además la silueta también difiere, siendo Anas strepera un ave más esbelta. El macho en plumaje de eclipse pierde el listado del plumaje, siendo entonces uniformemente pardo grisáceo. Los jóvenes son parecidos a la hembra, pero con el plumaje pardusco, el abdomen está moteado (no blanco como en los adultos) y el espejuelo es grisáceo.

Hábitat:

Es un pato que frecuenta aguas interiores: ríos, lagos, embalses, marismas, grandes estanques, lagunas... provistos de vegetación ribereña propicia para ocultar el nido.

Costumbres:

La alimentación del Ánade friso es similar a la que tiene el Ánade azulón: plantas acuáticas y terrestres, semillas, brotes, insectos, gusanos, moluscos, crustáceos, pequeños pececillos, ranas... Es un pato de superficie que para alcanzar el alimento subacuático sumerge todo el cuerpo a excepción de la cola (como el azulón). Su forma de vida es muy similar a la del Ánade azulón, de hecho, con frecuencia se le observa formando bandos mixtos con él.

Nidificación:

El Ánade friso construye el nido en las cercanías del agua, entre la abundante vegetación. El nido consiste en una pequeña depresión que la hembra excava en la tierra, y que recubre con hierbas, hojas y plumón. En su interior la hembra deposita entre 8 y 12 huevos, que son incubados exclusivamente por ella durante 26-28 días. Realiza una sola nidada anual, aunque si por diversos motivos la puesta se pierde puede realizar una de reposición, aunque en estos casos el número de huevos es menor. Los jóvenes ánades abandonan el nido a las pocas horas de nacer siguiendo a su madre, pues el macho se desentiende de la familia al inicio de la incubación. Los jóvenes frisos aprenden a volar entre los 50 y los 70 días, dependiendo de la duración del periodo de desarrollo.

Movimientos migratorios:

España cuenta con una población nidificante y sedentaria. Sin embargo, en invierno se produce un aporte de individuos foráneos de procedencia extrapirenaica.

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